El capitalismo y la desigualdad en el trabajo doméstico
Defendemos que el reparto igualitario del trabajo doméstico está limitado por características del modo de producción capitalista.
Defendemos que el reparto igualitario del trabajo doméstico está limitado por características del modo de producción capitalista.
Exploramos la lucha política de la clase obrera entre la política sindicalista y comunista. Discutimos las limitaciones del reformismo, el estado de la lucha política actual y la necesidad de la reconstitución del Partido Comunista.
El Gobierno de coalición PSOE-UP ha confirmado la naturaleza de clase del Estado, un Gobierno, en teoría, de izquierda, demuestra que otro camino lejos de las instituciones no sólo es posible sino necesario.
La cuestión medioambiental no es solo un legado que el capitalismo deja, sino una de las tareas revolucionarias más importantes: socializar la producción es necesario, pero no suficiente. El movimiento obrero que se toma en serio a sí mismo, es decir, el que aspira a tomar el control de la producción (y no sólo a mendigar un reglamento legal soportable para su propia explotación), se ve obligado a reconocer que la gestión de estos problemas es parte del legado que le deja el capitalismo.
La falta de un proyecto político revolucionario a largo plazo, es una de las problemáticas que persigue a los movimientos sociales en la actualidad. En lugar de dedicar tiempo y esfuerzo a determinar cuáles son sus limitaciones muchos colectivos acaban quedándose en el reformismo, pintándolo de radical, dedicando sus energías militantes al puro oportunismo.
Después mi experiencia en inspección laboral cabe preguntarse: ¿son las instituciones el lugar donde defender nuestros derechos como trabajadores o son el marco formal bajo el que se parapeta el capitalismo en defensa de sus intereses?
En el movimiento popular se habla mucho de que hay que organizarse; siempre con énfasis en el cuánto, en cómo conseguir que más gente se organice. Sí, queremos más organización, pero tenemos que hablar del cómo. Y del con quién, y para qué, e incluso contra qué o contra quién. En este artículo nos centraremos en la primera parte, en el cómo.
Desde hace unas semanas se viene hablando mucho sobre la crisis de abastecimiento que sufre Reino Unido: estantes vacíos en los supermercados, colas interminables en las gasolineras, carteles anunciando el fin de existencias… Imágenes que el aparato propagandístico de los países imperialistas ha querido siempre atribuir falsamente a países como Cuba o Venezuela son hoy, irónicamente, una realidad que la vieja metrópolis imperial está experimentando en sus propias carnes.
En los últimos tiempos estamos viendo como la consigna de la nacionalización está resonando en diferentes escenarios. Desde sectores alineados claramente con los intereses de la burguesía monopolista, como sectores de la pequeña burguesía y también dentro de los diferentes “Programas” de organizaciones obreras y comunistas.
La reciente crisis diplomática entre España y Marruecos desenmascara una vez más a los gestores del imperialismo. ¿Que se esconde bajo la careta institucional?